El curso pasado éramos los pequeños y sólo corrimos por dentro del cole. Este año ya nos tocaba hacer una carrera más larga.
Nos estuvimos preparando y calentando un poco antes de salir:
Al oir el silbato salimos pitando. No queríamos llegar los últimos.
Lo hicimos super bien y merecíamos una recompensa. Nos estaban esperando con fruta y agua para reponer fuerzas. Y... no podían faltar nuestras medallas.
¡¡ Estamos deseando que llegue la del año que viene!!
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